La evaluación de los representantes legales quienes coordinaron el Diplomado, MisClases SpA y a Estudio Verde Austral SpA, en el marco de la licitación pública N° 1884-LE23, convocado por el Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género (SernamEG), con financiamiento del Fondo Concursable del 7% del FNDR, Línea Social e Inclusión 2022, de la región de Antofagasta.
Es así que Rodrigo Cartes argumenta que fue una instancia formativa que se dio en la plataforma educativa MisClases, entre el día 7 de febrero de 2023 al 24 de marzo de 2023. “Durante ese período fueron más de diez docentes que impartieron sus clases, sus contenidos y, fueron más 93 personas inscritas en el programa, entre 54 personas aprobadas” y, quienes no aprobaron la etapa regular, por decisiones administrativas, “disponen de un plazo extraordinario para rendir las evaluaciones pendientes y la entrega de trabajo final, hasta fines de mayo”. En términos generales, el Diplomado, “abordó todas aquellas diferencias sexo genéricas que se pueden dar dentro de la dimensión humana; se trató de resaltar el capital cultural como aquel elemento central en el diálogo que nos debemos como personas. En ese sentido este diplomado, lo que buscó es que, como personas, nos aprendamos a reconocer, a mirarnos, y a contribuir colectivamente una convivencia pacífica”. Según sus palabras, “el programa estuvo pensado no solo para abordar las diferencias sexo genéricas que nos puedan caracterizar como humanos, sino también para sensibilizar, para humanizar y para contribuir a la convivencia pacífica de todo el colectivo, centrándonos en el aporte que cada uno de nosotros puede hacer, con nuestro capital cultural a una mejor sociedad”, concluyó Cartes.
Por su parte, Consuelo León, en representación de Estudio Verde Austral SpA, señala que resultaron interesantes las temáticas y la estructura de éste, “porque va desde lo general a grupos que están en la otredad, teniendo por objeto establecer una visión más bien crítica de lo que nosotros entendemos por vulnerabilidad, marginalidad, e incluso de este concepto de grupos vulnerables que podría haberse dado desde la perspectiva del derecho de las minorías, a grupos como la diversidad sexual con discapacidad, que si bien, no son grupos que sean minorías en sí, han estado en un debate en donde los miran distintos, diferentes y este tratamiento está aceptado en el siglo pasado, es decir, en el siglo XX y hoy día, a través de otras líneas de pensamiento, se releva una condición nueva, una visión que nos permite comprender desde otras perspectivas sus problemáticas, incluso lo que nosotros entendemos por dignidad y esto cómo se entrelaza con los distintos tratados de los derechos humanos”.
Dicho lo anterior, lo programado resultó interesante, “no solo por las temáticas, sino porque estuvo centrado en tener una visión de distintas perspectivas; se dividió en su estructura a través de clases asincrónicas grabadas, las materias a tratar teóricas. Sin embargo las clases las dan las clases magistrales donde cada una de las exponentes señaló y puso en valor una visión distinta a lo que nosotros conocemos como alteridad, o incluso llegaron a cuestionar esta dimensión universal de los derechos humanos al indicar que por ejemplo cuando se habla de los derechos de las mujeres, los movimientos indígenas de las mujeres, quienes tienen una visión mucho más crítica que no siempre adhiere a esta visión hegemónica que establece Europa y el primer mundo, como en este primer mundo estaría Estados Unidos”, describe.
De acuerdo a León, en el Diplomado, se pusieron en circulación los pensamientos feministas como los indígenas, “destacando los feminismos indígenas, el decolonial, también el feminismo ecológico, que vienen a ser un aporte a este debate, estableciendo una relación entre la mujer y la tierra, como un movimiento que puede ser liberador o emancipador”. En el marco de lo realizado, se revisaron los conceptos hegemónicos, o raciales, desde “el feminismo o la teoría de género y, en ese sentido es interesante conocer la línea decolonial y el feminismo indígena y desde ese lugar, también se hizo un análisis profundo sobre la diversidad sexual, los derechos reproductivos y, este derecho que es difícil de hablar, sobre los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, las diversidades sexuales de la tercera edad y la discapacidad, porque se tiende a establecer una visión más bien infantil, negadora de los aspectos humanos, tan esenciales como el placer, el deseo, que pueden tener las personas con discapacidad y cómo, desde su demanda, se comienza a hablar sobre deseo y placer, no solo teórico, sino en primera persona como lo hizo la profesora Carolina Pérez”, argumenta. Por lo tanto, “fue un aporte sustancial a los profesionales, porque fuimos de lo teórico a lo vivencial. En otras palabras, lo que se dijo es algo que está ahí, es parte del día a día”, concluyó Consuelo León.